Kuwait, reconocido por su tolerancia, quiere controlar más a los medios
El gobierno de Kuwait, que era hasta ahora uno de los países de Oriente Medio más respetuosos con la libertad de expresión, prepara una polémica nueva ley que aumentará el control sobre los medios de comunicación.
Numerosos diputados kuwaitíes han criticado con dureza esta iniciativa legislativa y han asegurado que supone "una vulneración de la esencia de la democracia", que "no se debe ir a la prisión por una simple opinión" o que "aquellos que no quieren críticas que se queden en casa".
Esta rica monarquía del Golfo es conocida por su vida política dinámica y por un debate acalorado, todo lo contrario de los países vecinos gobernados con mano de hierro por sus respectivos jeques.
Este nuevo proyecto de ley prevé sancionar las críticas contra los principales dirigentes, como el príncipe heredero, según su contenido revelado en medios locales.
El ejecutivo no ha presentado oficialmente el polémico texto, que surge tras unos últimos años marcados por tensiones políticas entre un parlamento controlado por una heterogénea oposición y el gobierno dominado por la familia real Al Sabah.
Contactadas por la AFP, las autoridades no se pronunciaron sobre el proyecto de ley.
- "Líneas rojas" -
El académico kuwaití Bader al Saif considera que en la época de la globalización y las nuevas tecnologías de la información "limitar la libertad de expresión y la prensa a través de leyes, probablemente inconstitucionales, resulta contraintuitivo".
"Los kuwaitíes están orgullosos de su historia vinculada a la libertad de reunión y expresión", recuerda este experto, quien considera que "los dirigentes deberían proteger estos derechos en lugar de limitarlos".
"En comparación con los países vecinos, disponemos de una mayor libertad", reconoce Mohamed Altmutawa, de 34 años, el director del medio independiente Manshoo.
Esta publicación fue fundada hace una década y es una de las pocas de la península arábiga que trata cuestiones controvertidas para esos países, como la situación de las minorías sexuales o el escaso apoyo de la administración a las mujeres que sufren violencia sexual.
No obstante, Altmutawa lamenta que en los últimos años el clima político y social se endureció en Kuwait. Por ejemplo, las autoridades de esta monarquía del Golfo prohibieron recientemente la difusión de la película "Barbie".
- Deriva conservadora -
Ante esta deriva conservadora, según el director de Manshoo, los periodistas de este medio independiente empujan hacia una mayor tolerancia, pero "sin sobrepasar las líneas rojas" del país.
"Vivimos en una región en que cada vez hay menos de libertad de expresión", lamenta Yasmena Almulla, de 28 años, una periodista de Manshoo especializada en temas sociales y medioambientales.
Según la oenegé Reporteros Sin Fronteras (RSF), los nuevos medios independientes resultan claves para favorecer una mayor libertad de expresión e informativa en Oriente Medio.
"Estos medios escasean en la región y su trabajo debería estar protegido para favorecer un paisaje mediático más sano y que tenga como objetivo real informar a los ciudadanos", afirma Jonathan Dagher, responsable de RSF en Oriente Medio.
Pero la nueva ley kuwaití tendrá un "efecto disuasivo" para estos periodistas independientes.
Aunque en Kuwait no hay "ningún periodista encarcelado", la situación de los medios y su libertad para informar resulta cada vez más "difícil".
"Pedimos a las autoridades kuwaitíes que respeten su compromiso a favor de la libertad de expresión", asegura Dagher.
A.Roberts--HHA