Hamburger Anzeiger - Biblia, balas, buey: las tres B todavía vigentes de los bolsonaristas

Biblia, balas, buey: las tres B todavía vigentes de los bolsonaristas
Biblia, balas, buey: las tres B todavía vigentes de los bolsonaristas / Foto: SILVIO AVILA - AFP

Biblia, balas, buey: las tres B todavía vigentes de los bolsonaristas

Buena parte de los electores del presidente Jair Bolsonaro responden a una de las tres B con las que se ha identificado al gobierno del ultraderechista: Biblia, balas y bueyes, en referencia respectiva a los evangélicos y los sectores proarmas y del agronegocio.

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Estos son los testimonios recogidos por la AFP en Rio de Janeiro, Sao Paulo y Luziania (centro-oeste).

- El expolicía que se sintió valorado

La admiración del expolicía Elitusalem Gomes Freitas por Bolsonaro es anterior a su elección en 2018, a un tiempo en que "ningún político se acercaba a dar el pésame a las familias de los agentes fallecidos" en servicio.

"Bolsonaro lo hacía. Lo conozco de entonces, cuando era un simple diputado federal y acudía a los entierros, rendía homenaje a nuestros colegas", explica este hombre blanco de 42 años, fortachón, que tras más de dos décadas como policía militar fue concejal suplente y ahora es candidato a diputado federal por Rio de Janeiro.

En sus redes sociales posa con el semblante serio, una camiseta negra con la inscripción "Bolsonaro", una bandera de Brasil sobre los hombros y empuñando una carabina. Se define como "padre de familia", "conservador", "proarmas" y "terror de la izquierda".

"La primera victoria de Bolsonaro generó una expectativa muy grande entre los conservadores. Pero problemas que se arrastran por 30 años no se resuelven en cuatro".

"El Partido de los Trabajadores (del expresidente y candidato Lula da Silva) robó durante la Copa del Mundo, en las Olimpíadas... en días normales. El gobierno Bolsonaro demostró que hay rectitud", agrega Gomes Freitas, convencido de que en el último mandato no hubo corrupción.

Reproduciendo el discurso del ultraderechista, asegura que en las altas cortes se trama un "conteo de votos secreto" con la intención de cometer fraude en las elecciones e impedir la victoria de Bolsonaro.

"Quienes acusan a Bolsonaro de querer dar un golpe están invirtiendo la narrativa. Son ellos los golpistas".

- La evangélica recelosa de sus valores

Mariza Russo Feres, una profesora de Matemáticas jubilada de 68 años, reza "todos los días por Brasil, por el presidente que Dios va a elegir".

A esta mujer de tez blanca y cabellos castaños, le inquieta la posibilidad de que el izquierdista Lula vuelva al poder: "Tengo miedo del comunismo, eso cambiaría nuestras vidas", explica, sentada en un banco del templo evangélico que lidera su marido y pastor en Pinheiros, un barrio de alto poder adquisitivo en Sao Paulo.

Cree que Bolsonaro es quien mejor defenderá los valores cristianos como "los principios de la familia", sobre los que ahonda en reuniones semanales con otras mujeres de la iglesia.

"Por ejemplo, el aborto es anticristiano y nos preocupa que un candidato (...) nos lo imponga", señala, en referencia a unas declaraciones que dio Lula en defensa de la interrupción del embarazo antes de retractarse, en un país tradicionalmente contrario.

Russo, que ya votó a Bolsonaro en 2018, teme también que Lula imponga una educación contraria a sus creencias: "Mis nietos son pequeños, ¿qué futuro tendrán con la enseñanza de la ideología de género?", dice, en referencia a los contenidos sobre diversidad sexual y de género.

Biblia en mano, Russo se arrodilla, cierra los ojos y se entrega a una nueva plegaria por su patria.

- El productor con facilidades

En la hacienda Onça donde trabaja Carlos Alberto Moresco no hay ningún cartel bolsonarista. Y es que lejos de cualquier "idolatría", este productor agropecuario asegura defender los hechos, esto es -dice-, que el presidente favoreció como ningún otro gobierno reciente el agronegocio, con la apertura de nuevos mercados en Asia y planes en infraestructura que favorecieron las exportaciones.

"Fue muy inteligente en la elección de los ministros. Nuestra (ex) ministra de Agricultura (Tereza Cristina) fue ingeniera agrónoma”, dice Moresco en la hacienda que arrenda en Luziania, en el estado de Goiás, una extensión de 1.500 hectáreas donde cultiva productos como maiz y soja.

De 47 años, estatura media y pelo grisáceo, Moresco destaca también la entrega de títulos de propiedad rural, más de 350.000 entre 2019 y 2022, a agricultores: Bolsonaro "dio dignidad a estas personas que antes solo ganaban una cesta básica. Hoy, con el título, pueden pedir créditos, plantar su tierra".

"Soy leal a quien es leal a mis valores y principios. Y nuestro presidente sabe valorar tanto al pobre como al rico, por eso creo que es merecedor de cuatro años más".

A.Roberts--HHA