Las inundaciones en Nepal dejan al menos 200 muertos
Las inundaciones y los deslizamientos de tierra provocados por las lluvias torrenciales ocurridas en Nepal, en especial en su capital Katmandú, dejaron al menos 200 muertos, anunció el lunes el Ministerio del Interior nepalí.
"Según nuestras últimas cifras, 200 personas han muerto, 127 resultaron heridas y 26 siguen desaparecidas", declaró a AFP el portavoz del ministerio, Rishi Ram Tiwari.
El anterior balance era de 192 muertos y 31 desaparecidos.
Los equipos de emergencia de Nepal continuaban sus labores de búsqueda y rescate el lunes entre las casas destruidas en Katmandú.
Barrios enteros de la capital nepalí se vieron inundados después de las lluvias más intensas caídas en el este y el centro del país en más de dos décadas, con la capital temporalmente incomunicada por los deslaves que bloquearon carreteras.
Al menos 35 de los fallecidos quedaron enterrados vivos cuando un deslizamiento de tierra sorprendió a vehículos en una carretera al sur de la capital, añadió el portavoz de la policía, Dan Bahadur Karki.
Según el ministerio, se están realizando labores para rescatar a numerosas personas que quedaron atrapadas en las carreteras.
Entre tanto, los rescatistas limpiaban el barro de los barrios más afectados alrededor de Katmandú, muchos de ellos asentamientos marginales no autorizados.
El río Bagmati y sus afluentes, que cruzan Katmandú, se desbordaron e inundaron los barrios ribereños, además de arrastrar vehículos, pasada la medianoche del sábado.
"Es una pesadilla", comentó Indra Prasad Timilsina, habitante de un barrio afectado. "Nunca en mi vida sufrí unas inundaciones tan extremas", confesó.
Según el ejército, más de 4.000 personas han sido rescatadas.
El valle de Katmandú registró 240 milímetros de lluvia en 24 horas, entre el viernes y el sábado por la mañana, indicó la agencia meteorológica nepalí.
Son las precipitaciones más importantes en la capital desde al menos 1970, añadió.
El departamento de hidrología y meteorología declaró que, según datos preliminares, las estaciones de 14 distritos midieron precipitaciones récord en las 24 horas antes de la mañana del sábado.
Los monzones, de junio a septiembre, provocan cada año muertos y daños en todo el sureste asiático, pero el número de inundaciones y deslaves aumentó en los últimos años.
Los expertos estiman que el cambio climático ha incrementado su frecuencia y gravedad.
A.Baumann--HHA