En Rusia, los opositores a la guerra se organizan
La directora de la red de televisión internacional RT está furiosa. ¿Cómo pueden algunos de sus conciudadanos estar en contra de la guerra de Vladimir Putin en Ucrania? Para ella, es sencillo: ya no son rusos.
Margarita Simonian, que acostumbra hacer agudos comentarios en Twitter en defensa del presidente ruso, al que llama "líder", no se anduvo con rodeos: "Si ahora se avergüenzan de ser rusos, no se preocupen, no son rusos".
Miles de personas se manifestaron contra la invasión rusa en Rusia y la reacción de la policía ha sido la misma que con los opositores al Kremlin: llevar a cabo centenares de detenciones.
Tanto es así que el movimiento se ha trasladado a Internet, empieza a hacerse oír y a recabar apoyos de algunas personas conocidas.
Las banderas ucranianas están omnipresentes en las fotos de perfil, así como los emoyis llorando. El hashtag #нетвойне (no a la guerra) era tendencia en Twitter el sábado.
Desde el jueves, fecha del inicio de la invasión, celebridades rusas de mayor o menos calibre expresaron su horror, su impotencia y pidieron el cese inmediato de esta guerra que azota el corazón de Europa.
El popular videoblogger y documentalista Yuri Doud consiguió un millón de "me gusta" por un mensaje publicado en las redes sociales.
"Escribo estas palabras con una razón. Cuando mis hijos crezcan y descubran este momento de la Historia, alucinen y me pregunten 'Papá, ¿qué hiciste?', quiero tener una prueba escrita de que no elegí este régimen y no apoyé su furia imperialista", escribió.
La periodista del diario Kommersant, Elena Tchernenko, contó por su parte haber sido excluida del pool de periodistas que seguían al ministro de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, por haber iniciado una petición antibélica entre sus colegas.
Una carta abierta de las profesiones artísticas y culturales contó el sábado con el apoyo de más de 2.000 personas del gremio y descalificó el argumento de Vladimir Putin de que la invasión era una operación de "mantenimiento de la paz" para salvar a los rusos del este de Ucrania.
"Obligar a la paz mediante el uso de la fuerza es absurdo", dice.
- 750.000 firmas -
Otros tantos médicos y enfermeros firmaron su propia carta en línea. "No importa cómo se justifique el uso de armas letales, siguen siendo letales", escribieron.
Y una petición contra la guerra en la página change.org recogió más de 750.000 firmas en dos días.
Celebridades, algunas de ellas acostumbradas a los platós de la televisión pública, también hicieron oír su voz.
"¡Hay que parar esto!", reaccionó Valeri Meladzé, un popular cantante de variedades, en Instagram el primer día de la invasión.
El Premio Nobel de la Paz 2021 y redactor jefe del periódico de la oposición Nóvaya Gazeta expresó su vergüenza en un vídeo online.
"Estamos sufriendo. Nuestro país, por orden del presidente Putin, ha iniciado una guerra contra Ucrania. Y nadie puede detenerlo. Por eso, además de nuestro sufrimiento, nos sentimos avergonzados", dijo Dmitri Muratov.
En una reacción muy simbólica, los fundadores del "Regimiento de los Inmortales", una organización muy querida por el Kremlin porque se encarga de preservar la memoria de los muertos de la Segunda Guerra Mundial, pidieron a Putin "que cesara el ataque", calificando este uso de la fuerza de "inhumano".
El museo de arte contemporáneo Garage de Moscú, fundado por el oligarca Roman Abramovich, vinculado al Kremlin, anunció su cierre el sábado, negándose a "mantener la ilusión de normalidad".
Y dos diputados comunistas que habían votado a favor del reconocimiento de Rusia de la independencia de las regiones separatistas prorrusas en el este de Ucrania denunciaron la invasión.
"Voté por la paz, no por la guerra (...) no por bombardear a Kiev", escribió el diputado Mikhaïl Matveïev.
Dirigiéndose a las personalidades y a los "miles y miles" de rusos anónimos que denuncian la invasión, el presidente ucraniano les dio las gracias.
R.Hansen--HHA