Hamburger Anzeiger - Alemania, destino codiciado de los estudiantes sirios de medicina

Alemania, destino codiciado de los estudiantes sirios de medicina
Alemania, destino codiciado de los estudiantes sirios de medicina / Foto: LOUAI BESHARA - AFP

Alemania, destino codiciado de los estudiantes sirios de medicina

En el patio de una clínica de Damasco donde es voluntario, Mohammad Chacho, un estudiante de medicina, sigue un curso por internet para mejorar su nivel de alemán, crucial para poder emigrar a la mayor economía europea.

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Desde el inicio de la guerra en Siria en 2011, Alemania se convirtió en el destino soñado de cientos de estudiantes de medicina sirios.

El país árabe contaba con un solo instituto de idioma alemán antes de 2011, pero actualmente hay más de 80 en las zonas controladas por el gobierno.

"La lengua alemana es muy difícil, sobre todo porque en Siria no la enseñan hablantes nativos", comentó a la AFP Chacho, de 23 años, quien cursa el sexto año en la Facultad de Medicina de Damasco.

"Pero el esfuerzo vale la pena y será olvidado apenas dé mis primeros pasos en Alemania", agregó el estudiante.

Cientos de miles de sirios llegaron a Alemania, especialmente en 2015, en el pico de la emigración masiva por la guerra.

La mayoría viajó sin tener visa, que es difícil de obtener para los sirios... con excepción de los médicos, que pueden obtener el preciado permiso para Alemania si cumplen ciertas condiciones, como tener un nivel relativamente alto de idioma alemán.

En ausencia de una representación alemana en Siria, los candidatos deben presentar su solicitud en las embajadas de Líbano, Jordania o en el consulado alemán de Erbil, en Irak.

- Alemania, destino seguro -

"Todos mis amigos han partido, se preparan para irse o lo están pensando", declaró a AFP Jaafar Mustafa, otro estudiante de medicina que también está aprendiendo alemán.

Alemania es "el destino más simple y seguro (...) hay una gran comunidad siria y no estaré fuera de lugar", comentó.

En el Instituto Árabe de Damasco, uno de los centros de lenguas extranjeras más antiguos de la capital, alrededor de 70% de los cerca de 1.000 alumnos inscritos en cursos de alemán tienen formación médica, según su director, Abdallah Saleh.

Antes de 2011, el interés de los estudiantes se centraba principalmente en aprender francés o inglés, pero la tendencia se revirtió a partir de 2013.

"El Instituto Goethe de Damasco era el único centro especializado en la enseñanza del alemán y cubría plenamente la demanda", indicó Saleh a AFP.

Aunque el Goethe cerró, "más de 80" escuelas más han abierto y los estudiantes deben registrarse anticipadamente para asegurar sus lugares.

Omar Fattuh, licenciado en literatura alemana de la Universidad de Damasco, imparte un curso en el Instituto Árabe y otros sitios de la capital, donde enseña la traducción de términos médicos al alemán.

La mayoría de sus alumnos son "estudiantes de medicina o solicitantes de reunificación familiar", apuntó.

- Fuga de cerebros -

La Oficina de Migración y Refugiados de Alemania ha registrado más de 700.000 solicitudes de asilo de sirios desde 2015.

El número de sirios radicados en Alemania es ahora de unos 924.000, frente a 118.000 en 2014.

Desde entonces, el número de sirios que obtienen asilo se ha reducido, pese a que Berlín reanudó recientemente la concesión de facilidades a los extranjeros, incluido el personal médico, para compensar la escasez de profesionales calificados.

Unos 5.404 médicos sirios ejercían en Alemania a fines de 2021, según la Orden Federal de Médicos de Alemania. Por lo tanto, representan el mayor contingente de practicantes extranjeros en el país europeo.

Las autoridades sirias no facilitaron el número de estudiantes que emigran anualmente.

Pero la viceministra de Educación Superior, Fadia Dib declaró en mayo de 2022 que la emigración de médicos "se convirtió en una realidad debido a la crisis económica".

Siria carece de especialistas en campos como "oncología, fisioterapia, radiología y anestesia", agregó.

Ante la fuga de cerebros, Nabough al-Aawa, ex decano de la Facultad de Medicina de Damasco, está preocupado por el futuro de la profesión en Siria.

"Mis estudiantes empiezan a aprender alemán desde los primeros años de estudio", cuenta este sexagenario que lleva más de 30 años enseñando medicina.

"Me entristece que los estemos perdiendo, se supone que deben tomar el relevo", dijo.

P.Meier--HHA