La bajada de temperaturas y las lluvias favorecen el combate de un megaincendio en Canadá
La caída de las temperaturas y las recientes lluvias deberían ayudar a los bomberos que combaten el enorme incendio forestal que devastó parte de la ciudad turística de Jasper, en el oeste de Canadá, dijeron este viernes las autoridades.
La ciudad está situada en el corazón del Parque Nacional Jasper, el más grande de Canadá y que atrae a 2,5 millones de visitantes cada año por sus montañas, glaciares, lagos y cascadas.
Entre el 30% y el 50% de la ciudad quedó destruida por este incendio, considerado aún "fuera de control" y que ya ha quemado más de 36.000 hectáreas.
"Las temperaturas bajaron y la lluvia comenzó poco después de la medianoche de anoche", dijo Parks Canada, que gestiona los parques nacionales del país y coordina la lucha contra los incendios en la zona.
"Se espera que las precipitaciones mantengan el comportamiento del fuego en un nivel bajo durante las próximas 72 horas", agregó la organización en su última actualización sobre la situación.
Se espera asimismo la llegada de soldados del ejército, así como de 400 bomberos provenientes de Nueva Zelanda, México y Sudáfrica.
Hasta ahora no se han registrado víctimas, ya que los 25.000 residentes y turistas presentes en la zona fueron evacuados durante la noche del lunes al martes, cuando el fuego creció repentinamente.
El incendio fue provocado por un rayo el lunes por la tarde, según Parks Canada, que hablaba de llamas de más de 100 metros de altura.
Según las autoridades, se necesitarán "varias semanas" para extinguir por completo las llamas.
En los últimos días se han producido numerosos incendios provocados por rayos en el oeste de Canadá, afectado por una severa sequía. Hay actualmente en la provincia de Alberta más de 170 incendios activos, mientras en la vecina Columbia Británica se contabilizan más de 400, en su mayoría fuera de control.
Existe temor en Canadá de revivir la catástrofe de 2023, cuando registró la peor temporada de incendios de su historia, con 15 millones de hectáreas quemadas y más de 200.000 personas evacuadas.
A.Baumann--HHA